miércoles, 4 de agosto de 2010

Reta:la gran aventura

Cuando era una nena y preadolescente, en los veranos nos íbamos al Reta en algún fin de semana. Nuestros padres eran jóvenes, y trataban de disfrutar un poco la vida, premio al trabajo cotidiano.
Nos juntábamos 2 ó 3 familias y viajábamos en un mismo vehículo, por ejemplo en un camión. Se tapaba la caja con una lona y allí íbamos todos, y con nosotros , los alimentos, las distintas ropas : para bañarse, por si hacía frío, pañales del infante, los toallones y toallas, repasadores; calzados varios, un calentador, el cochecito del bebé, jabón, una escoba ,( ya se sabe que para acampar antes hay que despejar de toda charamusca ,bichos ocasionales-que siempre hay-, hojitas y ramas), un farol, las bebidas en hielo, equipos de mate, alguna otra lona para hacer un reparo, en fin, un poco se trasladaba la casa para no pasar apuros . Y es que a veces se iba por varios días. ( Ahora entiendo porqué yo cuando viajo lleno mi maleta con tantas cosas que termino no usando !)
En aquellos tiempos ni se pensaba en bronceadores, ni protectores de piel. Eran otros soles? En realidad , a lo sumo se practicaba una refrescada de la cabeza con bastante frecuencia, se recomendaba tomar líquidos en abundancia, y no estar por largos períodos al sol, por lo que siempre había alguien debajo de la lona , buscando el equilibrio entre sol y sombra. A nadie le daba vergüenza veranear en esas condiciones. Hoy todo es absolutamente distinto. Pero como dijo el poeta: " No sabíamos que podíamos soñar con tanto, ni había necesidad de saberlo. Eramos ignorantes, y todo lo hacíamos con la simplicidad del ignorante. Y comíamos con un sólo cuchillo y un sólo tenedor, y una cuchara despareja, y un vaso quebrado, y una servilleta con ojos de buey..., y hasta nos mirábamos con cariño. Y todos éramos ciertamente mucho más buenos."

No hay comentarios:

Publicar un comentario