domingo, 12 de junio de 2011

Notitas de color (Doña Telma)

Fue famosa como curandera en el pueblo. Todos, creo, sin excepción, le visitaron alguna vez. Pero sus "dones" traspasaron los límites de Copetonas. Tenía "poderes", o era la desesperación de la gente la que hizo que fuera muy mentada?
Tenía remedio para todo, ( si se curaban o no, era otro cantar).
Desesperada por el asma crónico que tenía, y después de haber peregrinado por la Argentina viendo médicos, mi tía Haydée Alvarez, hermana de mamá, fue al pueblo a probar con la curandera local. Después de esperar su turno,-estaba lleno de gente-, pudo llegar mi tía a Doña Telma. Qué hablaron, hoy no lo recuerdo, pero sí lo qué le dió la curandera a la paciente: un frasco de agua bendita, y una bolsita de tela. Creo que en su domicilio mi tía debía decir alguna palabra antes de tomar el agua, y con la enigmática bolsita, teniéndola colgada del cuello o entre sus ropas, los males se le irían. Lo demás, corría por cuenta de Doña Telma, que rezaría por ella a partir de su nombre.
Pero cuando tía salió del "consultorio" (al fin de cuentas, es nombre apropiado), y llegó a casa de mis padres, abrió la bolsita, y vió lo que había adentro : alguna pequeña piedra, unas hojas y ¡ un bicho canasto!
Por supuesto, mi tía no se curó...

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